miércoles, 24 de abril de 2013

Für Wiener Philharmoniker

Für Wiener Philharmoniker

             El brillo del color de la alborada,
nacido entre las sombras y los hielos,
dibuja, con los suaves violonchelos,
la cuerda del violín alborotada.
             La música se eleva a su morada,
ligera como el aire, hacia los cielos,
y sienten su caricia los deshielos,
anuncio del final de la invernada.
             Y un halo de virtud teje, dichoso,
y afina, matemático, el talento
en el tapiz del arte, cuando suena:
             El beso de la música es hermoso
y el alma lleva al alto firmamento
la Orquesta Filarmónica de Viena.

2011 © José Ramón Muñiz Álvarez
"G'chichten aus dem Wienerwald"
TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS

No hay comentarios:

Publicar un comentario